Ante una emergencia, todo el mundo piensa en ayudar a las posibles víctimas con daños físicos que vemos a nuestro alrededor. No obstante, tanto estas víctimas (si están conscientes), como otras personas vinculadas al accidente o al accidente, precisan de ayuda psicológica en ese momento.
Es por ello que en este artículo te vamos a mostrar como puedes dar primeros auxilios psicológicos ante una posible emergencia ¡Empezamos!
La importancia de los primeros auxilios psicológicos
Cada persona afronta un hecho traumático de formas diferentes. No obstante, una emergencia siempre provoca un estado emocional agitado, en especial si están vinculados otros familiares o amigos.
Aunque pueda ser difícil, es algo que todo el mundo puede aprender. A diferencia de los primeros auxilios más avanzados que necesitan de un profesional que ha hecho un estudio profundo en su momento, nosotros podemos ayudar a que una persona afronte de mejor forma una situación traumática.
Eso sí, cabe recalcar que existen equipos especializados en prestar PP.AA Psicológicos en el mundo de las emergencias. Por ejemplo, contamos con la Unidad psicológica de protección civil de Murcia, ERIE Psicosocial de la Cruz Roja, etc.
Está claro que, si no somos profesionales del sector, no daremos una ayuda tan adecuada, pero si sabemos lo que podemos decir y lo que no, al menos podremos aportar nuestro granito de arena, y no empeorar la situación.
Es por ello que es muy recomendable que todos podamos dar una ayuda psicológica que, aunque mínima, al menos no empeore el estado psicológico de la persona. Para ello, te damos una serie de indicaciones sobre lo que puedes hacer y lo que no ante estas situaciones.
Consejos para dar primeros auxilios a nivel psicológico
Antes de nada, debemos transmitir seguridad y tranquilidad a la víctima. Lo primero es presentarnos y preguntar su nombre, como en casi cualquier interacción nueva con alguien.
Una vez tenemos ese contacto, le debemos preguntar por su estado y si recuerda lo que ha pasado. Tenemos que dejar que hable, que se desahogue, por lo que, si llora o grita, debemos dejar que se libere.
En caso de que sea posible, debemos alejar a la persona del suceso, así como a los curiosos de la zona, ya que podría estresarse. Si no ha tenido daños físicos, se le podrá ofrecer algo para beber.
Hay que ser empático con la persona, sin juzgar la forma en como afronta esta situación. Tenemos que escuchar, más que hablar.
No debemos rebajar la situación para intentar consolar a la persona. Debe saber en todo momento lo que ha pasado, para que pueda afrontarlo. Por ello, tampoco hay que mentir si nos pregunta algo.
Si hace falta pedirle algo, tiene que hacer de forma asertiva, siendo positivo, y evitando amenazas o agresividad. Tanto para esto, como para cualquier otra interacción, hay que valerse de la comunicación no verbal, mostrando una actitud de respeto, pero también de cercanía.
Sobre todo, evita que la persona se quede sola. Antes de ausentarte, lo mejor es que pidas a alguien que se quede con la víctima.
Conclusiones finales
Esperamos haberte ayudado a conocer mejor lo que puedes hacer para ayudar psicológicamente a una persona ante una emergencia. Cuando hay una emergencia que involucra a muchas personas, como puede ser un terremoto o un gran incendio, habrá psicólogos de emergencia que hagan estas labores.
No obstante, siempre es bueno saber lo que podemos hacer antes estas posibles situaciones. Ahora bien, si quieres profundizar más en el conocimiento de los primeros auxilios necesitas algo más, como los cursos que ponemos a tu disposición en EGS.
En Emergency Global System contamos con cursos para personal no sanitario, de forma que puedas extender estos conocimientos de forma más exhaustiva. Y si eres un profesional de la salud, puedes echar un vistazo a nuestros cursos orientados para profesionales. Damos formación continua en emergencias sanitarias.
