Un estudio de la Fundación Española del Corazón nos revela que, la falta de sueño unido al estrés laboral, hipertensión, sedentarismo u obesidad aumentan el riesgo de muerte cardiovascular.
Se cita que aproximadamente el 30% de la población española sufre de insomnio y que aumenta con la edad sobre todo en mujeres y en personas mayores. Gran parte de culpa la tienen el consumo de bebidas con azúcar y cafeína, las cenas copiosas, el alcohol y el uso irresponsable del mismo, no realizar ejercicio físico o realizarlo en horas cercanas al momento de acostarnos y la irregularidad de los horarios.
El sueño es parte del estilo saludable, como la actividad física y la alimentación equilibrada. “El triángulo de la supervivencia” muchos sabemos que el deporte contribuye favorablemente a nuestra salud aportandonos energía y bienestar. En los últimos años se le está dando mucha importancia a la alimentación. en la dieta y cómo nos afecta de manera muy positiva. Una vez hemos vencido a la rutina y nos hemos apuntado al gimnasio o cualquier deporte, llegamos a casa de trabajar, hacemos la compra, preparamos platos exquisitos y saludables. Pero… ¿Dormimos bien?
Las recomendaciones son claras y, en medida de lo posible debemos dormir más de seis horas y del tirón. Muchas personas se levantan a mitad de la noche a ir al baño, beber agua o comer y vuelven a la cama pensando en las preocupaciones del día a día sin conseguir descansar adecuadamente. Vamos a exponerlo de forma clara, no sólo son las horas de sueño, sino la calidad de horas que somos capaces de descansar y reposar la mente. Lamentablemente nos encontramos con la pescadilla que se muerde la cola ya que el insomnio genera estrés laboral y el estrés laboral insomnio así que, no lo dejes para mañana, trátalo, si no puedes tú solo consulta a un profesional, toma hábitos saludables, dale la importancia que merece a tu descanso ya que será el músculo que potenciará la sonrisa de mañana.
No tener unos hábitos saludables ayuda a tener más probabilidades de sufrir una muerte súbita.
Es importante completar el círculo, tener conocimientos en la materia de soporte vital y primeros auxilios, saber actuar en caso de emergencia y abandonar ese miedo y por último y no menos importante prever cualquier riesgo que pueda inducir a nuestro organismo a cualquier tipo de fallo, en éste caso cardiaco. Es el PAC: Prever, actuar y conocer.
“Todos juntos latimos con el mismo corazón”.
Fuente: Fundación Española del Corazón.
Conclusiones: Emergency Global System