Así se contempla la noticia sobre este gran amigo de “las comodidades y de la buena vida” , que a día de hoy vence a más de 27.000 españoles cada año suponiendo la segunda causa de muerte en España y la primera si solo contamos con las mujeres.
Los factores de riesgo del Ictus se presentan como el amigo más “cool” de la pandilla, aquél al que parece que todo le da igual, no entiende de horas de recogida, de obediencia ni sacrificio. Es ese amigo que le encanta beber las copas sin mesura y, que acompaña con el vaivén del humo de un cigarro con una pose atrevida y una sonrisa desafiante. Cuando tú le preguntas qué hace con su vida te responde: “nada”, no me gusta hacer deporte, trabajar o cuidarme. Se tira todo el día en la cama o en el sofá viendo alguna serie de Netflix, acompañado de patatas fritas o algún dulce.
Cuando eres joven parece que es lo que mola, llama la atención de una gran parte de los del grupo de amigos y el ritmo de vida se convierte en una sensación. Lo que nuestro amigo no sabe es que toda la energía que se está dejando en esa apariencia, van a ser desencadenantes de esta terrible enfermedad en un futuro, ya que ha convertido en su hábito esta forma de vivir, y para cambiar los hábitos se requiere de mucha fuerza de voluntad.
Así se presentan estos factores de riesgo del Ictus: sedentarismo, colesterol elevado, obesidad, consumo de alcohol, tabaco, hipertensión y diabetes. Según numerosos estudios el 90% de los casos de Ictus son prevenibles, pero esto conlleva un compromiso personal así que no esperes a que veas asomar las orejas al lobo y ponte manos a la obra. Se recomienda reducir el consumo de sal y grasas en las comidas, llevando una dieta sana y variada, haciendo ejercicio, dejando el tabaco, el alcohol, las drogas, controlando nuestro peso y con revisiones médicas.
